HISTORIA DE LA ARCHICOFRADÍA DEL PILAR (III):
DATOS BIOGRÁFICOS DE LOS FUNDADORES
Firmas de los fundadores
En la entrada
anterior hablamos de la importancia de los hermanos Manuel y Gerónimo Ignacio
Delfín en la
Archicofradía del Pilar, fundadores y principales artífices
en la consecución de un espacio en la iglesia de San Lorenzo para edificar la Capilla del Pilar. Seguidamente
conoceremos un poco más sobre su vida, su familia y su religiosidad.
Son hijos del genovés Bartolomé Delfín, casado
en segundas nupcias con la gaditana María de la
O Torres Peláez.[1]
Instalado en Cádiz a finales del siglo XVII, Bartolomé se dedicó a los
negocios. Aparece asociado dentro de las compañías comerciales existentes en la
ciudad a finales del siglo XVII, concretamente con la compañía de Carlos y
Guillermo Ferroni, milaneses, fundada en 1690, cuyo objeto era la fábrica y
explotación de una gabarra.[2]
Contribuyó espléndidamente a la
Corona durante la
Guerra de Sucesión, incluso ayudando económicamente a la
manutención de las tropas, lo que da una idea de su buena posición económica .[3] Estaba
muy bien relacionado en Cádiz como lo demuestra su testamento, donde aparece
como testigo y firmante Bernardo Recaño, marqués de Casa Recaño, una de las
fortunas más considerables de la ciudad en aquella época.[4]
Además de Manuel y Gerónimo Ignacio, tuvo que tener
otra hija, María Francisca, que casó con Juan de Castro y con el que tuvo una
hija, Catalina de Castro y Delfín.[5] Sólo
a través de los documentos concernientes a Catalina conocemos la existencia de
María Francisca Delfín. Ignoramos por el momento por qué no se encuentran
referencias a su persona en los documentos de su padre o hermanos.
Árbol genealógico de la Familia Delfín
Bartolomé
Delfín, en un poder para testar, desea ser enterrado en la iglesia del convento
de San Francisco.[6] La familia tenía una
especial relación con la comunidad franciscana. Los hermanos Delfín, en 1736,
obtuvieron un altar y dos sepulturas en la iglesia del convento franciscano,
concretamente en el lugar del pilar cercano a la verja del altar mayor, para
poner en dicho altar la imagen de un Ecce-Homo.[7]
Según consta
en una nota posterior escrita al margen en la escritura de donación de la
capilla a los hermanos Delfín, este altar y sepultura fue finalmente donada al
convento franciscano, en 1784, por Catalina de Castro y Delfín.
Manuel
Delfín
De Manuel
Delfín se conserva su partida de nacimiento, donde comprobamos que su nombre
completo es Manuel Lorenzo y que nació el 4 de septiembre de 1692.[8] Se dedicó
al comercio con las Indias. El puerto gaditano fue clave desde el siglo XVII en
el comercio hispanoamericano, confirmado oficialmente con el traslado en 1717
de la Casa de
Contratación, organismo encargado de regular el comercio colonial. Desde 1720,
Manuel participó en la flota de Nueva España cumpliendo con los debidos
trámites, como ocurrió en 1723, donde tuvo que documentar la ausencia de
impedimentos para poder comerciar, contando además en su Expediente de información y licencia de pasajero a Indias, con una
descripción física que nos permite hacernos una idea de su persona “mozo
soltero y de edad de treinta años, de buen cuerpo, ojos pardos, cargador en
esta próxima flota”.[9]
El comercio
con América era muy atractivo por las enormes ganancias que se podían obtener, pero
no estaba exento de peligros. Los ataques de corsarios o los naufragios por
diversas circunstancias, podían malograr las expediciones. Fue esto último lo
que le ocurrió a Manuel Delfín. Murió ahogado en 1751 en el naufragio del navío
El Retiro, embarcación de la que era su capitán. El desgraciado hecho sucedió
en el Caribe, sobre la Isla
de las Mujeres, en el Cabo de Catoche (península del Yucatán).[10] El
nombre oficial del navío era San Jerónimo, pero era conocido por El Retiro. Naufragó
el 24 de septiembre de 1751 en su trayecto hacia Veracruz llevando, entre otras
mercancías, gran cantidad de azogue.[11] De
la dotación de 200 hombres sólo se salvaron unos pocos marineros y el capellán,
no salvándose apenas nada de las mercancías.[12]
Zona aproximada del naufragio de Manuel Delfín
El
fallecimiento de Manuel Delfín, abintestato, produjo una copiosa documentación
tras la situación que dejaba con respecto a sus bienes y acreedores.
En los libros
de registro de hermanos de la
Archicofradía del Pilar, aparece como Fundador, Prioste y
Protector, inscrito desde el 1 de enero de 1731.[13]
Gerónimo
Ignacio Delfín
No tenemos
apenas datos de la vida de Gerónimo Ignacio Delfín, ya que los encontrados
responden mayoritariamente a su relación con la Archicofradía. En primer lugar, queda constancia
que el 24 de febrero de 1733 fue nombrado Diputado de Cuentas.[14] Dos
años después, el cargo pasa a su hermano Manuel, accediendo Gerónimo Ignacio,
desde el 21 de febrero de 1735, al cargo de Mayordomo.[15]
Gerónimo
Ignacio y su hermanastra Tomasa Delfín debieron estar muy unidos. A la muerte
de Manuel Delfín, fueron declarados únicos y universales herederos, nombrándose
recíprocamente por albaceas testamentarios y tenedores de bienes. En el
testamento recíproco que hacen Gerónimo Ignacio y Tomasa, el 2 de septiembre de
1752, nombran como heredera a su sobrina, Catalina de Castro y Delfín. En el
mismo documento expresan su deseo de ser enterrados con el hábito franciscano
en la iglesia del convento de San Francisco donde tienen la capilla del santo
Ecce-Homo.[16]
Otro documento
donde encontramos a Gerónimo Ignacio es en la partida de matrimonio de su
sobrina, Catalina de Castro y Delfín, enlace celebrado en 1755 y donde figura
como testigo.[17]
En los libros
de la Archicofradía
del Pilar aparece inscrito desde el 1 de enero de 1731. Se anota también la
fecha de su fallecimiento, en 1771. Tras cuarenta años como hermano, acompaña
al registro un texto que glosa lo que supuso la figura de Gerónimo Ignacio Delfín
para la Archicofradía : «…como nuestro Fundador, Mayordomo, Prioste
y Protector en esta Archicofradía, fundamento y baza principal desde su
establecimiento hasta su encumbrado ser».[18]
José María Collantes
González
[1]
Bartolomé Delfín casó en primeras nupcias con Ana Barroso, natural de Cádiz,
con quien tuvo una hija, Tomasa Delfín.
[2] Carrasco González, Mª Guadalupe (1997) Comerciantes y Casas de Negocio en Cádiz
(1650-1700) Servicio de Publicaciones de la Universidad de Cádiz,
p.126
[3] García-Mauriño Mundi, Margarita (1986)
«Los jenízaros y el comercio indiano (1700-1750)», Temas Americanistas, número 6, p.64
[4]
Archivo Histórico Provincial de Cádiz (AHPC), Protocolos. Poder para testar de
Bartolomé Delfín, CA-5078, ff.111-112
[5] AHPC, Protocolos.
Testamento de Catalina de Castro y Delfín, CH-385, ff.372-375
[6]
Archivo Histórico Provincial de Cádiz (AHPC), Protocolos. Poder para testar de
Bartolomé Delfín, CA-5078, ff.111-112
[7] AHPC, Protocolos. Donación
a favor de D. Gerónimo y D. Manuel Delfín , CA-3613, ff.536-538
[8]
Archivo Catedralicio de Cádiz (ACC), Sección Libros Sacramentales de Santa
Cruz. Bautismos, libro 28, f .
277v.
[9] Archivo General de Indias
(AGI) 1723, Manuel Delfín. Contratación, 5473, N.1, R.12
[10]
Archivo General de Indias (AGI) Bienes de difuntos: Manuel Delfín,
Contratación, 5634, N.1
[11] Historia Naval de España [En línea] Disponible en: http://www.todoavante.es/index.php?title=El_Retiro
[Consulta: noviembre 2016]
[12] De Castro, Javier (1988) «El peso de las
fuerzas naturales: los naufragios en el tráfico catalán de la Carrera de Indias
(1740-1778)» Pedralbes: revista
d´història moderna, número 8, p.475
[13] AHAPC, Hermanos y
Hermanas, Libro I, p.120
[14] AHAPC, Cuentas, Libro II,
f. 8v
[15] Ibídem, f.17 y 17 v
[16]
AHPC, Protocolos, Testamento recíproco de Gerónimo Ignacio Delfín y Tomasa
Delfín CA 5090 ff. 370-376
[17] ACC, Sección Libros
Sacramentales de Santa Cruz. Matrimonios, Libro 31, f .9
[18] AHAPC, Hermanos y
Hermanas, Libro I, p.73