Durante los días 9, 10 y 11 de Octubre se ha celebrado un Solemne Triduo de Rogativas por el final de la pandemia en Honor de nuestra Amantísima Titular Gloriosa, NUESTRA SEÑORA DEL PILAR DE ZARAGOZA, comenzando todos los días a las 19,45 horas con el Rezo del Santo Rosario, Ejercicio del Triduo y Santa Misa con Homilías a cargo de nuestro hermano archicofrade, Rvdo. P. Fray Juan Franco Pérez, O.P., perteneciente al Convento de San Pedro Mártir, de Madrid.
El día 10, la Sagrada Imagen del Pilar presidió la última celebración litúrgica de primeras comuniones de nuestra Parroquia, aún correspondiente al curso pasado.
El día 11, la Santa Misa fue aplicada por los residentes y trabajadores de la Residencia y Unidad de Estancia Diurna de la Fundación Fragela, en cuya capilla se encuentra, desde el pasado 1 de abril, la pequeña imagen de Nuestra Señora del Pilar, Divina Enfermera. Asimismo, en el transcurso de la Eucaristía, se procedió a la imposición de medallas a aquellos hermanos que lo habían solicitado.
El día 12, Festividad de Nuestra Señora del Pilar de Zaragoza, a las 12 de la mañana, tuvo lugar la Solemne Función Principal de Instituto, presidida por el antes citado orador sagrado. Animaron musicalmente la liturgia con sus cantos nuestros hermanos archicofrades Toñi Martínez Novas y Manuel Ruiz Gené, acompañados al órgano por D. Juan Antonio Verdía Díaz.
Tras la homilía, la Hermana Mayor, en nombre de todos los hermanos de la Archicofradía, realizó pública Protestación de Fe y renovación del Voto de Defensa del Dogma de la Inmaculada Concepción y de la Mediación Universal de Nuestra Señora. Tras ello, todos los hermanos presentes proclamaron su creencia, confesión, promesa y juramento de defensa.
Tras la Bendición, se entonaron los Gozos a la Santísima Virgen del Pilar, finalizando la Ceremonia con el rezo cantado de la Salve.
La Sagrada Imagen de la Virgen del Pilar ha sido entronizada para la ocasión en un Altar de Cultos situado en el presbiterio, delante del retablo mayor del Templo Parroquial, con exorno floral dispuesto por D. Jesús Garrido Marín, a base de claveles en tonos rosas. Lucía la Santísima Virgen rosario de color negro y reliquia de Santiago, donación de D. José Gómez Plana, y que perteneció al que fuera Prioste y hermano honorario de nuestra Archicofradía, D. Bartolomé Gómez Plana. Igualmente, por parte de la mayordomía, se había procedido a la limpieza de la corona de plata dorada a fuego, del siglo XVIII, que lucía esplendorosa sobre las sienes de Nuestra Señora.
Deseamos expresar nuestro agradecimiento a los numerosos hermanos archicofrades que han asistido a estos Cultos, a los miembros de la Parroquia que nos han acompañado, al servicio de altar y, por supuesto, a nuestro hermano Juan Franco, por sus predicaciones. Igualmente, a D. Juan Antonio Verdía Díaz, colaborador permanente de nuestra Archicofradía, por su acompañamiento musical al órgano durante las celebraciones del último día de triduo y Función Principal. Y a nuestros hermanos Manuel Ruiz y Toñi Martínez, por hacer posible que vuelvan a sonar todas las piezas musicales de temática pilarista que tiene la Archicofradía, así como los Gozos e Himno dedicados a la Santísima Virgen del Pilar.
